jueves, 14 de noviembre de 2024

 

Teatro en Cazorla

 

 “Manual para armar un sueño”

Teatro frente a la vida y la muerte

David Gómez Frías

 

Marco: Festival de Teatro de Cazorla. Ciclo: Teatrino. Fecha: 9 de noviembre de 2024. Escenario: Teatro de La Merced. Obra: “Manual para armar un sueño”. Reparto: Francisco Sánchez, Gaspar Campuzano, Enrique Bustos. Texto: Eusebio Calonge. Dirección: Paco de La Zaranda. Producción: Teatro La Zaranda, Teatro Español, Teatro de Rojas, Teatre Romea.

 


 Tiene el teatro un engaño oculto que afecta sin remedio al ego profundo de los actores, convirtiéndolos en victimas de su propio desafecto y ruina. La grandeza sobre el escenario puede destruir la belleza efímera de los sueños, porque sólo las almas humildes conocen el secreto para no caer de la cumbre. Esa cumbre de la fama donde no llegan todos los que quieren estar en ella, sino aquellos, aquellas que han sabido diferenciar la persona del personaje, no dejando nunca que adquiera mayor importancia la primera sobre el segundo. La fama posee menor longitud que la vida y los personajes, por su condición inmaterial, desconocen la longitud del tiempo y de su memoria. Ese es el engaño del teatro, hacer creer que un buen personaje hace eterno al actor o actriz que lo encarna. Pero el olvido y la muerte pasan factura, aquel porque expone las cicatrices del tiempo y calla las voces de los personajes, y esta porque pone fin a todo lo que tuvo que ser y a todo lo que ha sido sobre los escenarios de la vida, negando la virtud de los actores. Sobre esta poética de los egos, del olvido, de la vida y de la muerte, La Zaranda da forma a su último trabajo: “Manual para armar un sueño”. Un canto al ejercicio teatral adornado con frágiles matices poéticos con los que se logra el encanto mágico de los sueños. Su argumento lleva a un personaje a descender a los infiernos para traer a la luz a un viejo actor que habita en los espacios de la muerte. Un actor que vivió de una fama falsa, que se alzó sobre sus propios personajes ya hubieran nacido de Lorca, Shakespeare, Calderón o Valle-Inclán, que conoció el zarpazo del orgullo, que tomó el gusto a eso del olvido público. Y en este punto, cuando todo lo que fue se ha desmoronado, es donde el personaje encuentra al actor y se regenera el sueño original del teatro, aquel que hace palpitar la comunión de personajes y personas. Se alumbra aquí un ejercicio teatral crítico consigo mismo y crítico con la burocracia que lo asoma al abismo de la desesperación. Pero una vez iniciado el vuelo de la esperanza, una vez que se galopa a lomos del famélico Clavileño hasta hacerlo creer que es un ligero pegaso, una vez que se recupera la capacidad del desafío teatral, comienza la regeneración, la vivificación del hecho escénico. Si a este argumento unimos la experiencia portentosa y mítica de La Zaranada el resultado es un canto poético al arte de la interpretación. Este “Manual para armar un sueño” deja un sabor a despedida en ese preciso momento en el que todo vuelve a la memoria antes de que el olvido sea poco más que vacío, tiene además un olor a principio reivindicando que esto del teatro es un oficio tan largo como la vida y tiene, sobre todo, un grito contenido en la garganta en el que se resume la poética comprensiva del hecho mismo de actuar. Esta lección que deja La Zaranda no se mide en la longitud del tiempo ni de la memoria, sino en su capacidad preciosa de contradecir las emociones de los amantes del teatro.